No taller de escritura os nenos sorprendenos coa súa imaxinación. Deixamosvos un conto dun dos nosos alumnos de 3º de educación primaria coa axuda dos mestres.
Ademáis, o conto está acompañado dunha ilustración de elaboración propia.
Noraboa polo teu esforzo M.M.G!
LOS CAVERNÍCOLAS, GATBU Y EL MAGO
Érase una vez un gato y un mago que vivían en el bosque en una
casa abandonada. El mago se pasaba todo
el día haciendo los trucos que tenía en un libro mágico y que había heredado de su tatarabulo.
Un día se le ocurrió una idea “iba a fusionar el gato con un
búho”. Se concentró y pronunció las siguientes palabras:
“¡abracadaabra pata de cabra
el gato y el búho que se fusinen ya!”
De repente, los dos animales se convirtieron en uno. El nuevo
animal tenía plumas, podía correr a la velocidad de la luz y subir a los
árboles durante la noche y el día.
El mago cuando se dió cuenta descubrió que el animal ya no
estaba en el interior de la casa, se había escapado por un agujero que tenía en
la pared.
Catbu, que así lo llamó el mago,se paseó durante horas por el
bosque hasta que vió a unos cavernícolas cazando un mamut. El gato-búho al
verlo se sintió enfadado, porque no comprendía que aquellos seres matarán a un
mamut. Se armó de valor y al ver a uno de los cavernícolas girarse lo atacó y
lo mordió. Como era un ser mágico, Gatbu le habló y le dijo:
- ¿Por qué estáis aquí cazando mamuts?.
El cavernícola le respondió:
- Estamos de visita y queremos comérnoslo porque tenemos
hambre.
Gatbu pensó en como podía solucionar aquel problema. Decidió
llevar a los cavernícolas a la casa del mago. Allí intentaría convencer al mago
de hacer un truco para convertir: muebles viejos, ropa rota, hojas de los
árboles en alimento para aquellos hombres pudieran comer y marcharse a otro
lugar.
Al llegar a casa del mago, el hombre se escondió porque tenía
miedo de los cavernícolas. Le sorprendió que Gatbu se hiciera amigo de aquellos
hombres y no les tuviera miedo.
Tras unos segundos, el mago recordó un viejo truco que había
practicado unas semanas antes. El truco consistía en convertirse en serpiente y
pasar desapercibida para averiguar que decían aquellos hombres.
Cuando se disponía a salir por un pequeños agujero los
cavernícolas la vieron y decidieron comérsela. Cuando iban a empezar a
deborarla esta dejó de ser una serpiente y se convirtió en mago.
Gatbu se dirigió al mago y le explicó:
- Encontré estos hombres de vacaciones y tienen hambre.
El mago al escucharlo les dijo que les daría comida a cambio
de que no lo volvieran a molestar.
Los cavernícolas aceptaron, el mago cogió ropa usada y la puso
en la olla. Con uno de sus trucos cocinó
en su olla unos espaguettis con tomate. Estos se marcharon agradecidos y con un
poco de las sobras para continuar su viaje por el mundo.
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